De izq. a der.: Roberto Ruiz, Pablo del Olmo, Wladimiro Martin, Cristina Carbonell, Rafael Ortega, Javier Linger y Jose Luis García. Llegamos prontito al Gimnasio Banzai. Nos encontramos a Rafa rodeado de nietos en una deliciosa escena familiar. Todos los nietos de Rafael, en cuanto tienen edad para ello, practican yudo con él. Son las ventajas de tener un abuelo tan singular.
Como quedaban algunos minutos hasta la hora de la cita con el resto de profesores, tuvimos ocasión de charlar con el maestro Ortega de diversas cuestiones. Tras el verano sin verle había mucho que escuchar. Una de las novedades que nos comunicó es la regeneración de su página 'web'. Se ha incluido en la sección 'Quiénes somos' un estupendo reportaje sobre los comienzos de Rafa en el yudo; sobre su formación deportiva y profesional. La sección explica cómo ha llegado Ortega a compendiar su metodología sobre la base de las enseñanzas de grandes maestros y legendarios yudocas.
También hubo ocasión de comentar las nuevas propuestas de modificación del reglamento de competición y que van a aplicarse, a modo de prueba, en el próximo Campeonato del Mundo yunior. Ojalá cuajen y destierren las técnicas que han degradado el yudo como deporte de acción y reacción, primando atletas fortísimos frente a yudocas hábiles y elegantes.
Reunión técnica de trabajo
La cita era, como desde hace años, para reciclar nuestros conocimientos y homogeneizar nuestra peculiar forma de impartir clases de yudo, siempre dentro de las directrices técnicas del Método R. Ortega. El grupo de profesores que emplea este moderno método de enseñanza del yudo-total tenemos por costumbre reunirnos en el Gimnasio Banzai al comienzo de cada año. El objetivo no es otro que mejorar cada vez más nuestra programación y hacer de ella lo más adecuado a nuestros alumnos sin renunciar a hacerlo de forma divertida.
En ese reto volvemos, año tras año, a escuchar los aspectos más importantes del crecimiento neurovegetativo que nos recuerda el psicopedagogo Pepe Navalpotro. En esta ocasión excusó su presencia, quedando patentes sus indicaciones en todo momento. Tampoco pudimos contar con la presencia de Purificación Polo, nuestra experta en yudocas de corta edad (mangas naranjas, verdes y rojas). Pese a todo el grupo fue nutrido y surgieron cuestiones importantes que se debatieron con la aportación de la experiencia de cada uno de los reunidos.
Una de las cuestiones más debatidas fue la de la actual forma física de nuestros escolares, cada vez menos fuertes, menos elásticos, menos coordinados, que otros niños de generaciones anteriores. Entre las posibles causas están, sin duda, la vida sedentaria que llevan hoy en día los niños, la intensa ocupación laboral y social de su padres y madres. Todo ello, nos hizo concluir que contamos, los profesores de yudo con una tremenda responsabilidad; pero, al mismo tiempo, se trata de una gran oportunidad de ayudar a la formación de nuestros alumnos donde otras instituciones no llegan o tienen menor eficacia. De este modo, convinimos en introducir juegos y ejercicios más completos y estructurar el trabajo de las clases en forma de circuito, de manera que se introduzcan ejercicios de mayor intensidad de manera gradual y sin que originen rechazo en los alumnos.
En este capítulo Pablo del Olmo recordó la importancia de colaborar con los padres de nuestros alumnos en estos momentos en que la obesidad infantil es un problema muy extendido. Pablo recordó que algunos de estos niños obesos sólo practican yudo y ningún otro deporte. Sus padres tienen depositadas muchas esperanzas en ese par de horas a la semana de actividad física de sus hijos gorditos.
Actividades en el calendario
Para el presente curso volveremos a tener tres grandes actividades para nuestro colectivo infantil. Se harán coincidir aproximadamente con el final de cada trimestre. Para Navidades volveremos a tener el Festival de Juvenalia. En el segundo trimestre, se volverá a organizar el entrenamiento en frío que los japoneses conocen con el nombre de 'kangueiko'. Posteriormente, para clausurar el curso, tendremos el Festival Infantil de Ajalvir. A estas actividades comunes, cada escuela añade las suyas propias; pero la especial importancia de las reseñadas es que vuelven a planearse como la oportunidad de confluir nuestros esfuerzos y demostrarnos que seguimos caminando en la misma dirección y con los mismos objetivos. Además, de ser una fiesta para nuestros yudocas, nos dan la oportunidad de expresar a los padres de los niños las bases de nuestro programa y la impronta de nuestra metodología
En cuanto a la primera de las grandes citas, fue el maestro Javier Linger el que recordó que mantendremos la estructura del programa a desarrollar en Juvenalia, pero que conviene actualizar los juegos. Aportó Linger varias propuestas quedando abierto el turno de sugerencias y modificaciones, con lo que nuestros yudocas pueden estar tranquilos en el sentido de que sus profesores ya están preparando todo para que el Festival de Juvenalia vuelva a ser todo un éxito, como siempre lo ha sido.
Otras cuestiones
Ya que andamos recordando las grandes actividades que tendremos en este curso 2009 – 2010, sería bueno hacer mención a alguna que pueden aprovechar nuestros adultos. Hablamos, por ejemplo, de la oportunidad con que volveremos a contar al final del curso en cuanto a pases de grado se refiere. Para principios de julio se celebra en Ajalvir un examen de cinturones negros al que pueden optar quienes cumplen con la normativa oficial. La primera condición, como no podía ser de otra manera es tener licencia federativa. Por eso recordamos la importancia de renovar en estos días las licencias (o de tramitarlas por primera vez en el caso de alumnos nuevos).
Muchos alumnos nuestros que ya han llegado a cinturón marrón (con 15 años mínimo) pueden tener en consideración la posibilidad de plantearse el objetivo de examinarse de cinturón negro al final del curso. Se hará una especial preparación de este importante evento para quienes opten al cinturón negro primer dan así como a quienes pudieran optar a pasar de dan.
Además de estos exámenes de fin de curso, para los adultos volveremos a procurar abarcar varios ámbitos de expansión deportiva. Cuidando el yudo recreativo volveremos a organizar 'Mañanas del YU' en las que practicar de manera lúdica y divertida técnicas deportivas y también de yudo para la calle. También habrá campo de expansión para los más enérgicos pues tenemos pensado volver a presentar nuestro equipo juvenil en la Liga Nacional de la Federación Madrileña de Judo, así como el combinado Parla-Fraymor, para poder participar en la Tercera División de dicha Liga Nacional. Finalmente, para no dejar sin abarcar ningún ámbito, queremos insistir en la necesidad de dedicar más tiempo a las katas. Iremos paulatinamente incorporando en las clases de yudo recreativo las katas de yudo y recomendamos a nuestros alumnos que tengan en consideración la posibilidad de participar en el Campeonato de Katas que organizan los maestros Ortega y Linger en Ajalvir coincidiendo con el Kangueiko juvenil.
Conclusiones
Cuando una persona inscribe a su hijo en una actividad tiene derecho a pensar que éste será atendido por profesionales cualificados. Los profesionales cualificados deben cuidar su formación y estar actualizados en cuanto a sus conocimientos y al programa que pretenden desarrollar a lo largo del curso. Esto hace que acudan a sus clases más motivados, con lo que es probable que motiven más a sus alumnos. Pero hay que insistir en que no basta con los conocimientos sino que hay que revisar la forma de propagarlos y lo adecuados que sean para unos colectivos u otros. Este suele ser el punto trascendental en el que flojean algunos colectivos profesionales y algunas instituciones. Los resultados se ven a muy largo plazo, pero, cuando se ven, hay poquísimo margen de corrección.
En la actualidad se debate en muchas federaciones autonómicas de yudo sobre las causas de la alarmante bajada de yudocas con licencia, especialmente de yudocas adultos. También en la escuela de nuestros días se habla de bajísimos niveles de conocimiento y comprensión, así como de la tremenda constatación de lo que se conoce como 'fracaso escolar'.
En el grupo de profesionales del Yudo Total de la Metodología R. Ortega se tiene absoluta confianza en nuestra forma de trabajo. Nuestros esfuerzos y programas están preparados para ser de la máxima eficacia y de gran atractivo; no escatimamos cuando las clases se dirigen a alumnos de centros concertados o de tipo social en los que se abonan cuotas simbólicas. Algunos estamentos y personas no acaban de comprender esto. No es nuevo lo de no valorar lo que se tiene más cercano. No obstante, nuestros éxitos son nuestros números y nuestro orgullo es el fruto de nuestro trabajo; y creemos sinceramente que vamos a seguir así durante mucho tiempo (así en la falta de valoración como en nuestra implicación profesional... ¡pues no somos pesados ni nada los yudocas!)
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