La primera Mañana del YU de esta temporada ha sido un gran éxito. Se dividió la participación de los yudocas en tres grandes grupos en atención a las diferentes edades de los participantes. En el primer grupo se trabajó en una sesión similar a las clases de yudo habituales en nuestros centros con los mangas naranjas; estuvieron espléndidos.
De este modo, muchos padres tuvieron ocasión de ver, por primera vez, a sus pequeños yudocas en acción. Y esperamos que todo eso que anunciábamos de la magia y la salsa de ingredientes secretos no haya defraudado a nadie (lo podéis leer más abajo o PICANDO AQUÍ)
Intentamos llevar a cabo un entrenamiento, algo más festivo de lo habitual, pero con la misma intensidad de nuestras clases. De hecho, llegamos a introducir alguna novedad para que vean los padres que ‘nos hacemos con los niños’ (tenemos mucha experiencia), pero también tiene sus dificultades.
Sólo se hubo de lamentar que uno de nuestros fenomenales yudocas de esta corta edad se sintió indispuesto (no quiso perderse la Mañana del YU pese a tener la tripilla un poco revuelta) y finalmente tuvo que salir por encontrarse un poco peor.
Los demás, lo pasamos en grande. Fue tal nuestro estado de concentración y nuestro grado de entrega a lo que hacíamos que se nos fue el santo al cielo y no tomamos imágenes con nuestra cámara como era nuestra intención. Menos mal que muchos padres fueron bien provistos de cámaras de fotos y tomavistas y se pudieron llevar un recuerdo imborrable. No obstante, también hemos hablado con los papás de los hermanos Ibáñez Hazen y nos han prometido mandarnos algunas imágenes de nuestra fiesta. Aprovechamos para hacer similar llamamiento, desde aquí, a quienes quieran mandarnos algunas otras fotos (o vídeos) de esta Mañana del Yu. Quedaríamos muy agradecidos.
También hacemos especial mención al esfuerzo realizado por los padres de los yudocas del CEIP Ciudad de Guadalajara que cada vez acuden a más de nuestras actividades con la consiguiente alegría que ello nos da al sentirnos respaldados con dicha actitud. Entre los participantes de este colegio de Barajas estaban los hermanos Nieves y José, junto a Candela y Jaime.
Precisamente la presencia de José se aprovechó para felicitar a este niño tan interesado en el yudo que ha sido capaz de inventar un juego que pasa por ser uno de los que más gustan en estos momentos: “el submarino”. Fue el propio José el que explicó las reglas y pasamos a disfrutar de la ocurrencia de yudoca manga naranja tan singular y ocurrente.
Mangas verdes, rojas y amarillas
Si en el primer grupo se reunieron más de una docena de yudocas de entre 4 y 6 años de edad en el segundo hubo 16. Lástima que en este grupo no hubiera ningún niño del CEIP Ciudad de Guadalajara porque lo pasamos en grande y, para colmo, completamos un fenomenal entrenamiento.
Algunos muchachos, que el año pasado se encontraban en el grupo de mangas naranjas, demostraron lo mucho que han progresado y sus padres pudieron comprobar como van creciendo, como personas y como yudocas. Hubo multitud de ejercicios que los niños realzaron con verdadero interés y se puede decir que completaron una intensa sesión de yudo en la que hubo un poco de todo (calentamiento, defensa personal, caídas, kata, juegos, randori y estiramientos).
Para acabar y como habíamos prometido, se procedió a dar el regalo sorpresa a los padres más grandes. En el turno de los mangas naranjas, quedaron por entregarse (cosa que se hará en las respectivas clases de los niños) dado que hubo empate y en ese momento no se contaba con tal eventualidad. Y en el turno de los mangas verdes rojas y amarillas el regalo sorpresa se lo llevó el padre de Javier Pinilla. Se trataba de un forro polar de los de la talla más grande de los que encargamos la temporada pasada. Ese era el motivo de premiar al, padre más grande de los que acompañasen a su hijo a la primera Mañana del YU de esta temporada.
La presentación de Alberto Álvarez
Cuando llegó el turno de los ‘mayores’ se procedió a organizar un calentamiento muy dinámico y divertido. Corriendo en todas direcciones aplicamos la ocurrencia de otro alumno manga amarilla que inventó los trenes y los vagones para defenderse en un calentamiento de los de ‘mano rodilla y pisada de ardilla’. Después, para acabar de tonificar el cuerpo, se pudo comprobar lo fatigoso que puede llegar a resultar lo de simular vestirse y desvestirse con ayuda del cinturón.
Tras el calentamiento se llegó a un gran momento: el de a presentación de la escuela de Juko-Shin Ryo, por parte de Alberto Álvarez. Nuestro compañero acaba de ser designado delegado para Madrid de la prestigiosa escuela encabezada por el octavo dan Bryan Cheek.
Alberto fue explicando multitud de técnicas y las diferencias con otras similares aplicadas por otras escuelas. Fue haciéndolo, proponiendo una sucesión de ejercicios y técnicas, siempre de menor a mayor dificultad y con orden metodológico para facilitar la progresión y aprendizaje, dentro de la propia sesión.
A pesar de que habíamos citado a los muchachos de 13 años en adelante, el ambiente fue magnífico y se trabajó con muchísimo interés. También hay que destacar que Javier Linger se tomó la molestia de acudir desde Rivas Vaciamadrid, atraído por la curiosidad de conocer este sistema de yu yiutsu (como el gran maestro que es, no pierde ocasión de probar todo lo relacionado con el yudo que le sale al paso). Además, hay que decir que Linger siempre intenta secundar cuantas actividades realizamos y no es raro verle con nosotros, incluso después de haber pasado toda una noche en vela por haber estado de guardia en su trabajo.
La sesión de Alberto se prolongó hasta las 13:30 horas que habíamos establecido como momento en que pondríamos punto y final a esta primera Mañana del Yu. No obstante, como la gran mayoría de los asistentes eran yudocas, decidimos, con los que quisieron, continuar unos minutos más para poder hacer una serie de randoris en suelo desde diferentes posiciones y en diferentes situaciones que surgían explicando las posibilidades de encadenamiento del trabajo de pie con el de suelo.
Como suele ser preceptivo en este tipo de reuniones de yudocas, todavía hubo una tanda más o grupo, que fue el que se formó en la cervecería más próxima, donde se produjeron los últimos comentarios mientras se reponían las sales y líquidos recién perdidos.
A destacar en esta sesión la presencia de un animoso padre que, pese a haber sido sometido a una importante operación quirúrgica en la columna vertebral no dudó en aplicarse en cuanto se explicaba. Se trata de Juan Pedro, el padre de Itziar Sánchez, que también acudió al entrenamiento y que no es la primera vez que interviene en alguno de nuestros entrenamientos de puertas abiertas. Además, nuestra yudoca Lidia García, aprovechó para animar a sus hermanas (que también practicaron yudo tiempo atrás) a que tomaran parte en nuestro entrenamiento. Al final sólo Laura saltó al tatami, mientras Celia prefirió quedar de espectadora.
Finalmente, aprovechamos para felicitar también a Erick que llevó invitadas a su hermana Michelle y a su prima Cristina que tomaron parte en la Mañana del Yu y que practican yudo en el IES El Olivo, donde hace unos días hemos comenzado a impartir nuestra disciplina. Fueron las únicas valientes de este instituto de ESO que respondieron a nuestra invitación, pero el viernes, ya hubo algunos compañeros más que estuvieron entrenando con nosotros. En concreto, se acercaron, además de Cristina Morales, los compañeros Roberto Ginés, Ellen Cavalcante, Nataly, Clement y Bryan. También a ellos les felicitamos por el interés que están poniendo en aprender mucho yudo y lo antes posible.
