Nuevos cinturones de honor

Hola amigos

Os pedimos un poco de paciencia en estos días. Andamos bastante liados en un curso que ha arrancado con multitud de propuestas y un calendario apretado. Ya se nos va un mes más y estamos, en estos días, a tope con la entrega y recogida de puntos (yus) y con los trofeos de fin de mes.

Ayer, sin ir más lejos, solventamos estos asuntos en cinco de nuestras clases de yudo. A las cuatro de la tarde comenzaron a entregar puntos los ‘inquietos’ muchachos del IES El Olivo, que están trabajando duro y bien, pero siguen siendo demasiado ruidosos. Destacó la menudita Ángela Nataly Simbaña, que, de momento, no se ha perdido una. Ha acudido a cuantos entrenamientos se le ha invitado y no ha dejado de acudir con presteza a todos los entrenamientos de su instituto. Además, fue la campeona de jamones y, claro, con todo eso, ha sido capaz de reunir más yus que ningún otro compañero. Por otra parte, en el primer trofeo de fin de mes de este instituto parleño el campeón ha resultado ser Badr El Din El Hassani, que se impuso en el torneo de sumo con que solemos arrancar lides en cuantos centros impartimos la enseñanza de yudo. A ambos les felicitamos y animamos a seguir por ese camino de entrega y pasión por nuestro deporte.

Poco después, en la clase de chiqui-yudo, en un día de especial presencia infantil destacamos de nuevo a Iván Hidalgo. El menor de los hermanos Hidalgo ha vuelto a ser el que más puntos reunió, aunque, esta vez, sólo ha tenido 10 puntillos de ventaja respecto a algunos de sus compañeros. Por otra parte, el cinturón rojo ha pasado a manos de Ethan Campos, que desarrolló una fenomenal participación en el trofeo de fin de mes. Son nuestros dos nuevos cinturones de honor y saludarán durante todo el mes junto al profesor, bajo la imagen de Yigoro Kano.

En la clase de mangas verdes, rojas y amarillas, las cosas van más despacio. Es la clase más numerosa de todas con 24 alumnos. Ya hemos comentado que se reúnen diferentes niños de diferentes edades y tiene su especial complicación. Claro que ¿quién iba a pensar que ni uno solo de los ‘chiqui-yudocas’ del año pasado se iba a dar de baja? Eso ha dado lugar a que muchos mangas verdes (que el año pasado eran mangas naranjas) se hayan incorporado a esta clase de los martes y jueves (de 18:00 a 19:00) y que se sumen a los mangas rojas del año pasado (de los que tampoco se acusa baja alguna, por cierto). El resultado es que hablamos de una clase muy nutrida con niños que todavía tienen el ‘chip’ de manga naranja y que, poco a poco, van comprendiendo que su trabajo ya no es el de sus compañeros menores (de 4, 5 y 6 años).

En todo caso, el cnturón negro lo llevará Jesús Lázaro, tras resolverse el triple empate en que había incurrido, junto a sus compañeros Sergio Velarde y Miriam Castro. Curiosamente estamos hablando de tres los muchachos que más interés están poniendo y que empiezan a destacar, junto a algunos otros, muy por encima del resto de compañeros. Por eso les felicitamos a los tres, como también hacemos extensiva la felicitación a David Yáñez, que impuso su eficacia con contundencia y llevará el cinturón rojo a lo largo de todo el mes de diciembre.

En la clase juvenil, con participación de algunos alumnos invitados que acudieron a repasar un poco la nague-no-kata, se desarrolló un estupendo torneo de fin de mes en el que se impuso Erick Bolaños que ha dado un importante salto cualitativo en sus entrenamientos. Hay que decir que Erick está oficiando de ‘sempai’ en el IES El Olivo, en el que no falta a ninguna clase y ejerce una importante labor de sita kyoei o mutuo beneficio. Además, Erick consiguió ser el que más puntos entregó en su clase (no así en el IES el Olivo) y, por tanto, llevará el cinturón rojinegro durante todo el próximo mes.

Finalmente, en la clase de yudo total tuvimos una divertida competencia por dirimir el alumno que tendría el honor de proclamarse campeón del mes. Resultó ser Sergio María, que se impuso a sus compañeros en reñidos encuentros, de gran intensidad y no exentos de divertidas situaciones.

Esta tarde tendremos más cinturones negros y rojos y, pronto, también daremos cuenta de lo que acontece en el CEIP Ciudad de Guadalajara, donde algunos muchachos empiezan a trabajar con muy firme voluntad de convertirse en buenos yudocas. En ese sentido podemos destacar a los hermanos Gómez dios que, entre otras cosas, no dejan de participar en cuantas actividades extraordinarias organizamos. Seguro que estos tres estupendos yudocas van a acabar ‘tirando del carro’ y animando a sus compañeros (de momento más pasivos, pese a los esfuerzos de la profesora Cristina). Esperamos y deseamos que sea así, cuando ya queda menos de un mes para nuestra importante cita en el Festival de Juvenalia.