El pasado domingo, para completar otro gran fin de semana,
tras haber estado el sábado en Arganda , en el Open Internacional para
alevines, tuvimos la cuarta jornada de la liga de yudo: nuestra excursión a Los
Asientos de Valsaín.
Con esta propuesta se incentiva la participación, antes que
nada, en la Liga Municipal de Yudo de Parla. Así, dejamos para el final la
posibilidad de que todos los participantes, sus familiares y técnicos convivan
en un día de campo intercambiando experiencias y conociéndose mejor. Y así fue
en el incomparable paraje natural de Los Asientos de Valsaín a orillas del río
Eresma en pleno Parque Regional de Guadarrama.
La meteorología amenazaba tormentas, opero a la postre
cayeron cuatro gotas que como buenos yudocas supimos esquivar (con Tai sabaki) sin arredrarnos en ningún
momento y con gran éxito de la propuesta. Hubo carreras, juegos, paseos… hasta
baños en el río. Al final casi completamos en autocar que costeó íntegramente,
aunque algunos no se lo crean, el club organizador. CDE WLAC Yudo… ¡nosotros!
Como, además se acercaron algunos coches particulares por
diversos motivos reunimos el medio centenar de participantes y no hubo que
recurrir al Plan B que era refugiarnos en la cercana población de Valsaín.
Los chicos se fueron agrupando por afinidades con absoluta
espontaneidad y libertad. Acabaron haciendo grupos por edades similares
destacando los menores que viajaban sin la atenta mirada de los padres, al
cargo de la veterana profesora Cristina que ofició con maestría. Claro que
también hay que decir que el grupo de niños dio auténticas lecciones de
educación y camaradería, lo que es gran trabajo de los padres y familiares, sin
duda. Otra cosa es la confianza demostrada en su profesora de yudo que
agradecemos y estimamos muchísimo.
Salimos de Parla a las diez de la mañana según lo previsto.
El viaje fue placentero y llegamos a la hora y media. Ocupamos unas cuantas
mesas del merendero y, enseguida, algunos niños se acercaron al área de columpios
que también ocuparon. Otros muchachos y muchachas prefirieron explorar la zona
y, cómo no, el río. Los padres y familiares, entre tanto disponían las mesas y,
al rato, ya estaban muchos llevándose a la boca las viandas dispuestas poco
antes al efecto.
Esta vez la excursión por la ruta de las Pesquerías Reales se
hizo con algo más de anarquía, pero muchos la cubrieron hasta el vecino paraje
natural de Boca del Asno.
A la vuelta, todos satisfechos, algunos aprovecharon para
echar una cabezadita en el autocar. En definitiva otro gran éxito de nuestro
colectivo.
NOS VEMOS EN LOS TATAMIS
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