El pasado domingo día 4 de este mes de marzo se celebró un nuevo reciclaje para maestros de yudo. Siempre es un placer ponerse el kimono y compartir doyo con muchos maestros a los que no se suele ver desde hace tiempo (como se deben ver los yudocas: en yudogui). Además, es necesario reciclarse y no sólo por cuestiones deontológicas. La federación exige que un maestro acuda a uno de estos reciclajes si quiere presentar a alumnos a pases de grado (de dan). Una de las anécdotas es que ya no se hace saludo en este tipo de reuniones porque "se trata de una reunión de amigos", según explicó el presidente de la Federación Madrileña de Yudo, Francisco Valcárcel. Nosotros creemos que el ReiShiKi está para algo. Y tenemos la suerte de tener un maestro como Rafael Ortega que tiene muy claro el asunto. Ya iremos informando sobre este particular asunto. De momento os dejamos esta opinión para que pongáis vuestros comentarios al final del mismo. se aceptan críticas, por supuesto, pero se tendrán en cuenta si vienen fundamentadas. Gracias.
La historia del otoshi
Ya hace muchos, pero que muchos años –más de los que uno quisiera tener que reconocer- que quien esto suscribe estaba realizando su curso de entrenador regional. Las clases de yudo pie las impartía el maestro Macario García a quien se le profesa un gran respeto y se le tiene admiración, como ha quedado patente en este YUDIARIO en más de una ocasión. En aquel entonces, cuando asistimos al viejo doyo del INEF a su clase. Nos encontramos sentado en el banco, vestido de paisano, al maestro Lee Young –nada menos-. Su semblante serio denotaba y su extraña presencia allí denotaba que algo iba a pasar.
Macario empezó medio balbuceando, con esa facilidad de palabra suya que siempre ha tenido (es una ironía) a hablar de cosas inconexas. Se notaba que la presencia de Lee le incomodaba. Dijo que él siempre había hecho las llaves como le habían enseñado. Dijo algo de morote seoe nague y algo de seoe-otoshi. Hizo alguna demostración y yo no acababa de comprender hasta que escuché a mi compañero de al lado –mi amigo Jorge Raga- que asombrado se decía en un susurro: nague es parábola o lanzamiento. Luego, Macario en sus balbuceos acertó a decir: bueno aquí tenemos a un maestro que nos puede corregir. Lee, con mucha calma explicó que “primero hay que saber qué es nague y qué es otoshi”. Yo que acababa de escuchar a Jorge Raga (discípulo de Taira, otro oriental) empecé a sacar conclusiones. Enseguida le pregunté a mi compañero que qué quería decir otoshi. Me contestó que derribo. Enseguida comprendí que otoshi no quería decir poner la pierna por fuera como yo había supuesto durante mucho tiempo. Luego me di cuenta de que se trataba de cómo se tira al compañero (lanzando en parábola, por ejemplo, o estrellando contra el suelo o derribando directamente); lo de la pierna por fuera era aleatorio. De aquello, de verdad lo digo, hace muchos, pero que muchos años.
El pasado domingo asistí a uno de esos reciclajes que tenemos que hacer los maestros para poder intervenir en un tribunal de grados y examinar a quienes optan a algún dan. También se exige pasar por estos reciclajes si se pretende presentar a estos mismos exámenes a algún alumno. Yo fui por éste último motivo dado que no me gusta juzgar a los alumnos de otros maestros (y menos para decidir en veinte minutos si están aptos para el nivel de cinturón negro).
El caso es que, en un momento determinado, me sorprendió que un miembro de la comisión técnica explicó que para hacer seoe-otosi, es obligatorio poner una rodilla en el suelo o las dos. En esa misma comisión técnica, según tengo entendido, está mi admirado maestro Macario García. Mi reacción fue levantar la mano y tratar de dar mi argumento, el que doy ahora en este YUDIARIO. Pero los años atemperan los espíritus más aguerridos y las cosas cobran diferente valor a los veinte que cerca de los cincuenta años. Me callé. Al acabar consulté con mi maestro y me dio su opinión que comparto absolutamente: ¿para qué entrar en polémicas?
Ahora sé cómo se pide el seoe-otoshi (con una o las rodillas en el suelo) y también sigo sabiendo lo que significa otosi y la diferencia que existe con nague. Lo aprendí hace muchos, pero que muchos años.
Ya hace muchos, pero que muchos años –más de los que uno quisiera tener que reconocer- que quien esto suscribe estaba realizando su curso de entrenador regional. Las clases de yudo pie las impartía el maestro Macario García a quien se le profesa un gran respeto y se le tiene admiración, como ha quedado patente en este YUDIARIO en más de una ocasión. En aquel entonces, cuando asistimos al viejo doyo del INEF a su clase. Nos encontramos sentado en el banco, vestido de paisano, al maestro Lee Young –nada menos-. Su semblante serio denotaba y su extraña presencia allí denotaba que algo iba a pasar.
Macario empezó medio balbuceando, con esa facilidad de palabra suya que siempre ha tenido (es una ironía) a hablar de cosas inconexas. Se notaba que la presencia de Lee le incomodaba. Dijo que él siempre había hecho las llaves como le habían enseñado. Dijo algo de morote seoe nague y algo de seoe-otoshi. Hizo alguna demostración y yo no acababa de comprender hasta que escuché a mi compañero de al lado –mi amigo Jorge Raga- que asombrado se decía en un susurro: nague es parábola o lanzamiento. Luego, Macario en sus balbuceos acertó a decir: bueno aquí tenemos a un maestro que nos puede corregir. Lee, con mucha calma explicó que “primero hay que saber qué es nague y qué es otoshi”. Yo que acababa de escuchar a Jorge Raga (discípulo de Taira, otro oriental) empecé a sacar conclusiones. Enseguida le pregunté a mi compañero que qué quería decir otoshi. Me contestó que derribo. Enseguida comprendí que otoshi no quería decir poner la pierna por fuera como yo había supuesto durante mucho tiempo. Luego me di cuenta de que se trataba de cómo se tira al compañero (lanzando en parábola, por ejemplo, o estrellando contra el suelo o derribando directamente); lo de la pierna por fuera era aleatorio. De aquello, de verdad lo digo, hace muchos, pero que muchos años.
El pasado domingo asistí a uno de esos reciclajes que tenemos que hacer los maestros para poder intervenir en un tribunal de grados y examinar a quienes optan a algún dan. También se exige pasar por estos reciclajes si se pretende presentar a estos mismos exámenes a algún alumno. Yo fui por éste último motivo dado que no me gusta juzgar a los alumnos de otros maestros (y menos para decidir en veinte minutos si están aptos para el nivel de cinturón negro).
El caso es que, en un momento determinado, me sorprendió que un miembro de la comisión técnica explicó que para hacer seoe-otosi, es obligatorio poner una rodilla en el suelo o las dos. En esa misma comisión técnica, según tengo entendido, está mi admirado maestro Macario García. Mi reacción fue levantar la mano y tratar de dar mi argumento, el que doy ahora en este YUDIARIO. Pero los años atemperan los espíritus más aguerridos y las cosas cobran diferente valor a los veinte que cerca de los cincuenta años. Me callé. Al acabar consulté con mi maestro y me dio su opinión que comparto absolutamente: ¿para qué entrar en polémicas?
Ahora sé cómo se pide el seoe-otoshi (con una o las rodillas en el suelo) y también sigo sabiendo lo que significa otosi y la diferencia que existe con nague. Lo aprendí hace muchos, pero que muchos años.
¡Hola, queridos compañeros del Budo! En primer lugar, animaros a que sigáis así con vuestro espíritu y vuestra página web y deciros que con respecto a la falta de etiqueta en los reciclajes de Maestros de Judo me parece sorprendente, por no decir otra cosa, que se omita su realización con la excusa absurda que es una reunión de amigos; ¿Qué pasa, que sólo se saluda a los judokas enemigos y/o rivales? En fin, menos mal que los que no somos Presidente de la Fede, ni 8º Dan tenemos claro lo que debe hacer uno cuando pisa un Dojo y sabemos lo que debemos enseñar a nuestros alumnos.
ResponderEliminarEn referencia a la cuestión técnica entre otoshi y nage estoy completamente de acuerdo con vosotros y que es cierto que es mejor no entrar en polémicas.
Por otro lado, comentaros que también se dijo cuál era el origen de Yamaharashi y deciros que ni el Presidente ni el Maestro Ortega estuvieron acertados en su explicación ya que Saigo, según los investigadores, no saben si realmente hacia Yamaharashi como una técnica o denominaban así al estilo de combatir de Saigo y no a una técnica en concreto, por otro lado, hay que recordar que Saigo era experto en la Daito ryu Aikijujutsu dónde Yamaharashi se realiza de una forma completamente diferente a la que en Judo se conoce. De igual forma,si miramos las crónicas de la época veremos que Saigo lanzaba literalmente a sus Uke de cabeza contra el piso, lo que concuerda con la forma de realizar la técnica por parte de la Daito ryu.
En cuanto a la profesión de barquero de Saigo decir que fue adoptado por su padre pero al parecer era una triquiñuela ya que la adopción parece ser que era falsa y sí era su verdadero padre aunque Saigo es posible que no lo supiera (al parecer era su hijo no reconocido), su padre era Maestro de Jujutsu y Saigo su sucesor natural y no un simple barquero (la escuela de Jujutsu a la que pertenecían era de una casta samurai bastante importante de la época). Para terminar y no aburriros, decir que realmente a lo que el Presi se refería era a Yoshiaki Yamashita, judoka que estuvo en los EEUU desde 1902 a 1909 y enseñó Judo al Presidente Roosevelt, el cuál sufría de dolores en la rodilla derecha y solía mantenerla flexionada al hacer movimientos de cadera dando lugar al nacimiento de Hanegoshi.