Magnífica representación infantil de WLAC-Yudo en el Congreso de la Federación de Yu-Yitsu
Acabando el curso y a tope todavía. Son las cosas de nuestra
escuela en la que vivimos con intensidad cada momento, así sea al comienzo de la
temporada o cuando estamos a punto de finalizarla. Son las cosas de nuestro
deporte.
El sábado por la mañana dividimos fuerzas para abarcar
nuevamente dos escenarios muy distintos. Mientras el profesor Wladimiro acudía
a las instalaciones del Consejo Superior de Deportes la profesora Cristina se
dirigía al Polideportivo Joan Miró de Móstoles con la monitora María, su hija. En
el consejo Superior de Deportes se iba a desarrollar el reciclaje de profesores
de yudo que da derecho a participar en tribunales de pase de grado y a
presentar alumnos a dichos exámenes. En el Joan Miró se celebraba el Congreso
Internacional de la Federación Española de Ju-Jitsu en el que participaban
activamente Cristina Carbonell, María Abial y Sergio Cortés.
Reciclaje de profesores de yudo
Desde Torrejón de Ardoz el profesor Wladimiro acudió al
reciclaje de maestros con su amigo Miguel Expósito, recuperado para el yudo y
uno de los veteranos de este deporte en la localidad.
En cuanto comenzó la sesión con un saludo en el que se pudo
comprobar la gran cantidad de sextos y séptimos danes que hay en nuestra
disciplina se comenzó la sesión. Lo primero que se comunicó es que todo queda
como está pues no hay cambios significativos a la espera de una posible
remodelación de los programas de pase de grado en un futuro próximo. De ese
modo, el maestro José María Larrañaga se dirigió a los congregados asumiendo la
función de portavoz oficial. Planteó nuestro amigo Chema que hay algunas técnicas
de yudo (llaves) sobre las que hay que prestar especial atención pues a su
juicio sistemáticamente se ponen en práctica de manera errónea. En el primer
ejemplo, en el morote-gari ya fue contestado por nuestro maestro Ortega que
recordó la importancia de saber la correcta traducción de cada llave. Acto
seguido se habló (otro año más; y van…) de que al realizar un otosi
(morote-seoe-otosi, por ejemplo) hay que poner una rodilla o las dos en el
suelo para que sea correcta la ejecución. Fue en ese momento cuando quien esto
suscribe pidió aclaración por cuanto o-tosi lo que quiere decir en japonés es
estampar (o amartillar) y para realizar tal acción no es imprescindible el
poner dos rodillas en el suelo o ninguna.
La discusión se mantuvo algún tiempo y me acordé de la
historia que ya he contado varias veces y que se produjo hace muchísimos años. Uno
de los profesores encargados de la asignatura de yudo pie en un curso de
monitores reconvino a un alumno que realizaba morote seoe-nague con una pierna
por fuera. Al pedirle que realizara entonces seoe-otosi, el muchacho volivió a
adquirir la misma posición, pero lanzaba de muy diferente manera a su uke. El detalle
pasó inadvertido al profesor (nunca digo su nombre en público por el cariño que
le tengo) y recriminó al alumno su actitud. Resultó que ese alumno tenía un
maestro oriental; en concreto, nada menos que el maestro Lee Young, que se tomó
la molestia de acudir a la mañana siguiente al lugar en que el profesor “regañón”
iba a impartir una de sus clases. La escena fue magnífica. Al profesor titular
no le llegaba la camisa (la chaqueta del yudogui, en este caso) al cuello. Trató
de explicarse que para él siempre se había realizado morote-seoe-nague con los
dos pies al interior de uke y morote-seoe-otosi con uno dentro y el otro fuera.
Casi pidiendo clemencia se dirigió al maestro Lee pidiendo que aclarase la situación
y consciente de que su presencia allí estaba motivada por la regañina (injustificada)
que se había llevado uno de sus alumnos. El maestro Lee sólo dijo: para
realizar morote seoe-nague y morote seo-otosi primero hay que saber lo que
significa nague y lo que significa otosi. Algunos, treinta años después siguen
sin saberlo.
Eso sí, para zanjar la discusión (interesante discusión) en
una actitud un tanto dictatorial dio unas cuantas palmadas, pidió que se acercase
la congregación a la mesa a la que estaba sentado y explicó que ahí no se había
ido a discutir si otosi se hacía de una manera u otra. Que la comisión
explicase cómo se hace cada cosa y que nos pusiéramos a practicar. Así es que
se perdió una nueva ocasión de escuchar la opinión de grandes maestros como Rafael
Ortega y nos aplicamos a la interesante tarea de realizar por enésima vez los
movimientos de nague-no-kata y katame-no-kata, que esos también, son los mismos
desde hace lustros. Una pena.
(Como demostración de que esta cuestión viene de lejos os
dejo el enlace a la crónica del reciclaje de profesores de 2007. PICA AQUÍ PARA LEERLA)
Entrenamiento infantil
Entre tanto, en el ámbito del Congreso Internacional de la Federación
Española de Ju-Jitsu se celebraba un entrenamiento especial para niños de entre
4 y 14 años de edad. Nuestro grupo, el más numeroso, acudió puntual a su cita
y, enseguida, se ocupó de ellos la profesora Cristina Carbonell. Estuvo bien
secundada por los monitores María Abial y Sergio Cortés, que hicieron las
delicias de los cerca de setenta niños congregados. No obstante hubo que
acortar la sesión de nuestra profesora Cristina para dar paso a las
exhibiciones infantiles en las que también tuvimos protagonismo. Tres parejas
de nuestros alevines hicieron la nague-no-kata al mismo tiempo demostrando que también
en este terreno vamos madurando a pasos agigantados. Fue muy linda la ejecución
de los muchachos que van viendo fruto a sus esfuerzos y a las muchas
correcciones que se les ha hecho en los últimos días.
Acto seguido los mismos niños siguieron entrenando bajo las órdenes
de otro profesor de otra especialidad. Siempre aprendemos de todo el mundo pero
tenemos que dejar nuestro comentario aquí. No nos gusta poner a un niño
enfrente de toro a que se den patadas y puñetazos. Tampoco a hacer kami-basamis
y palancas sobre el codo, porque no es didáctico, ni formativo. Quitando este
asunto al que no vamos a dedicar más tiempo la sesión fue muy positiva para
nuestro WLAC-Yudo que salió fortalecido como grupo y como escuela. Estamos muy
orgullosos de nuestro equipo y también de los padres de nuestros alumnos que no
dejan pasar una oportunidad para mostrarnos su apoyo en cada nueva iniciativa. Pero,
sobre todo, tenemos que dedicar nuestros más efusivos elogios a nuestra
chavalería que suele dejar por todo lo alto nuestro pabellón. Con chicos como
estos es fácil olvidar los pequeños sinsabores que tiene la singular profesión
de la educación a través del deporte (o de esto que algunos siguen empeñados en
llamar artes marciales).
A Jaime le tocó en la rifa algo de material deportivo |
Congreso Internacional
María practicando con Sergio |
Sergio con el mismísimo Alain Sailly |
Por más que quiso, el profesor Wladimiro llegó cuando ya se
desalojaba el pabellón y no pudo presenciar la magnífica participación de su
grupo. Pero quedaba aún mucho Congreso por delante y, por qué no decirlo, una
auténtica prueba para Wladimiro. Estaba en el cuadro de profesores entre
nombres de mucha talla e incluso fama internacional. Todo un honor.
Wladi explica con Sergio de uke |
Wladimiro fue convocado a dirigir la última sesión de la
tarde en el tatami en el que tendría por pupilos a los altos grados. Su trabajo
gustó por su honestidad y eficacia. Sobre la base de ataques sucesivos aplicó
los principios del YU demostrando que nuestro estilo es abierto (ecléctico)
pero con mucha personalidad. En nuestras clases de yudo –lo decimos a menudo-
todo tiene un sentido integral. Siempre hemos entendido el yudo como el estilo de
yu-yitsu obra del fundador Yigoro Kano. En su momento fue el más moderno estilo
y acabó eclipsando a todos los demás y por ello dejó de hablarse de yu-yitsu
para hablarse de yudo. En nuestras fechas se cumplen 130 años de la fundación
del yudo y, como es natural, ha habido una enorme evolución; también ha habido
renuncias o sacrificios. Para que el yudo eclosionara como deporte y pudiera
extenderse por los cinco continentes se olvidaron atemis y recursos que podrían
representar peligro para los practicantes en encuentros deportivos. También las
katas quedaron relegadas a un papel secundario y hoy en día vuelven a emerger. En
nuestro caso, hemos procurado no olvidar todo esto y es por ello por lo que muy
dignamente encajamos en el ámbito de la recién constituida Federación Española
de Yu-Yitsu a la que agradecemos el habernos hecho un hueco por haber entendido
nuestra forma de pensar y obrar. Tenemos un gran futuro por delante en una
institución que también parece con un gran futuro a tenor del magnífico
Congreso Internacional con que ha sido presentada en sociedad. Junto a Wladimiro Martín hubo maestros de la talla
internacional de Alain Sailly o Michael Paul, o del prestigio y reconocimiento
de José Ramón Díez, Roberto de Juan o Francisco Silvestre.
A María, al acabar la sesión, aún le quedaron fuerzas para demostrar como se trepa por la cuerda |
NOTA: Como no se puede repicar campanas y estar en misa a la profesora Cristina no se le hizo ninguna foto en su esplendida clase infantil. Creemos que pronto nos llegará alguna imagen cedida de los muchos amigos con los que compartimos tatami. de momento, os invitamos a visitar:
FEDERACION ESPAÑOLA DE JU-JITSU
SILVER
MAKOTO
PODÉIS ECHAR UN VISTAZO A NUESTRO REPORTAJE FOTOGRÁFICO PICANDO SOBRE ESTAS LÍNEAS
NOS VEMOS EN LOS TATAMIS
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