Un año más el maestro
Como en anteriores ediciones, volvimos a reunir a casi medio millar de yudocas de todas nuestras escuelas y, principalmente de cinco entidades federadas: Yudo
Hablando de equipo de trabajo hay que decir que nuestro extenso colectivo estuvo asistido por la profesora Cristina Carbonell dado que el maestro Wladimiro se vio involucrado en otro acontecimiento de primera magnitud del que también se da cuenta en este mismo espacio digital (el I Congreso Internacional de Jiu-Jitsu España 2010, de WKF y HADO).
No obstante, Wladi tuvo tiempo para ponerse el yudogui y hacer acto de presencia en Ajalvir donde vio ponerse en marcha la actividad y saludó a los muchos mangas amarillas, azules, infantiles y cadetes de nuestra escuela que allí acudieron.
La primera sesión, la de los mayores (mayores que los demás participantes) comenzó, según lo programado a las 9;00 horas. Hubo estupendas exhibiciones de nuestro yudo-total y una magnífica participación de chicos de diferentes edades y grados, todos muy aplicados y disciplinados.
A continuación, a las 10:30 llegó la gran avalancha. La presencia de mangas rojas y verdes desbordó toda previsión y el tatami se colmó de vigorosos yudocas de entre seis y nueve años de edad. A pesar de todo, la profesionalidad de
Finalmente, a las doce y cuarto comenzaron los más pequeños, los ‘chiqui-yudocas’ con sus mangas naranjas que indican que tienen 3, 4 o 5 años. También lo hicieron de maravilla con alguna honrosa excepción. Cuando un niño de estas edades se levanta atravesadito, no hay manera. Pero lo bueno de estas reuniones es que los padres tienen ocasión de ver cómo se comportan sus retoños (pueden sacar conclusiones de cómo son habitualmente) y, lo mismo, empiezan a dar valor a la abnegada labor diaria de sus educadores (en este caso profesores de yudo).
Todas estas exhibiciones infantiles estuvieron aderezadas, como es habitual, con el reparto de cientos de camisetas y regalos para todos y cada uno de los participantes, con los habituales sorteos de atractivos regalos y con la salida final en la que se recoge todo un cargamento de regalos (películas, golosinas, bollos, fruta, refrescos, juguetes, medallas…)
Un año más se puede decir que el objetivo se cumplió con creces y que ya se empieza a preparar el siguiente Festival de Ajalvir, con la que llegaremos a, como diría el campeón de motociclismo Ángel Nieto las doce más una (o sea a la decimotercera edición).
Antes de acabar, desde aquí queremos felicitar a los padres de nuestros alumnos por su implicación y su sentido de la colaboración, organizándose entre ellos para poder dar traslado a todos los muchachos desde un punto tan alejado de Ajalvir como es Parla (más de 50 kilómetros). Además, expresamos nuestra gratitud hacia la organización y hacia el Ayuntamiento de Ajalvir, que como siempre se volcó con el yudo y abrió sus puertas a nuestros yudocas. Finalmente, expresamos nuestra satisfacción de ver a nuestra gente tan plena de energía como siempre y tan ejemplar en el sentido de guías y predecesores en el camino. Gracias a todos por este aldabonazo a un curso cargado de actividades y emociones.
Ajalvir XII Festival Infantil de Yudo |
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